Soy incapaz de contar todas las veces que he llorado por una historia de amor rota, pero muchos se me han olvidado. Lo que no puedo recordar es el número de veces que he sonreído al pensar en esos ojos, como se clavan en los míos... o cuando bajo para verte y solo pensar que en un rato estaré ahí besándote ya me deja la sonrisa en medio de la cara, porque 5 minutos hablando contigo hacen que sonría el resto del tiempo.
Un día me dijiste que lo que más feliz te hacía a ti es verme sonreír, si quieres que lo siga haciendo... retomemos las cosas de hace tantos meses y no pararé de hacerlo.
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